El candombe es un género musical que tiene sus raíces en el África bantú,[2] y es propio de Uruguay, la Argentina y Brasil. El candombe uruguayo es el más practicado y difundido internacionalmente y ha sido reconocido por la UNESCO como Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad[1] . El candombe argentino puede encontrarse, en menor medida y en forma focalizada, en las ciudades de Buenos Aires, Santa Fe, Paraná, Saladas y Corrientes[3] y en Brasil en la zona de Minas Gerais.
Originado a partir de influencias de música africana, fue desarrollándose en ambas orillas del Río de la Plata debido a la gran afluencia de negros esclavos durante la época colonial y hasta bien entrado el siglo XIX, ya con la forma republicana en vida en ambas orillas. Con el correr del siglo XX el candombe uruguayo fue dejando paulatinamente de ser una característica exclusiva de los afrouruguayos para pasar a ser un rasgo de identidad de la cultura uruguaya. El candombe argentino recién cobró visibilidad hace pocos años y su práctica se circunscribe a los afroargentinos del tronco colonial.
La influencia africana no fue ajena a la Argentina, donde el candombe también se desarrolló con características propias. En Buenos Aires hay población negra africana esclavizada desde su misma fundación, en 1580. La mención más antigua documentada de la palabra candombe en Buenos Aires aparece en un documento del Cabildo del 27 de junio de 1825 en el que se prohibieron a los negros hacer sus "batuques" y "candombes".Sin embargo su permanencia en la cultura argentina fue prácticamente extinta debido a hechos como la epidemia de fiebre amarilla y la Guerra del Paraguay que diezmaron la población negra y la llevaron al borde de la desaparición y, con ella, sus rasgos identitarios ancestrales.
En la ciudad de Buenos Aires, fundamentalmente en los barrios del sur hoy llamados San Telmo, Monserrat y San Cristóbal, se congregaban multitudes de negros para practicarlo. Fue decreciendo paralelamente con la invisibilización que diversos gobiernos nacionales hicieron con los negros desde la segunda mitad del siglo XIX, diezmados por las causas citadas y el caudal inmigratorio de blancos europeos que los desplazó del servicio doméstico, los oficios artesanales y la venta calleja. Por otra parte, el candombe porteño permaneció oculto de cara a la sociedad envolvente por voluntad de los propios afrodescendientes durante más de un siglo, resurgiendo hace pocos años. El candombe porteño o argentino no tiene otro apelativo que estos, cualquier otra denominación, como “candombe rioplatense” o “candombe guariló”, no son reconocidas propias ni válidas por sus cultores ya que son producto de personas e intereses que no están mancomunados con los de los afroporteños y, por ende, carecen de valor y representatividad.
martes, 19 de octubre de 2010
candonbe
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario